jueves, 13 de agosto de 2009

Las lagartijas

Aunque esta historia pueda parecernos graciosa y hasta inverosímil, refleja el problema de la condición humana. Y digo condición humana porque, a pesar de que se habla mucho de los problemas que enfrentamos en nuesto país, es la indiferencia un mal que aqueja a los países del mundo entero y no sólo al nuestro.

Esta es la historia de un perro que, tras ver que dos lagartijas pelean entre sí, recorre el pueblo en busca de alguien que se preocupe por ellas y ayude a terminar el conflicto. Sin embargo, cada uno de los animales a quienes ve (un gallo, un buey y un burro) no demuestra interés alguno porque "no es su problema". Al final del día, la pelea de las lagartijas termina incendiando la casa de una anciana, cuya muerte si supone un problema para el gallo, el buey y el burro. Para el funeral se cocinan al gallo y al buey; y el burro es quien tiene que cargar todo el día lo necesario para que todo se lleve a cabo.

¿Qué aprendemos de esta historia? Un problema de alguien más (tan aparentemente insignificante como la pelea entre dos lagartijas) es realmente problema de todos los que estén en el sistema. Y es aquí donde debemos aplicar la Quinta Disciplina de Peter Senge: el pensamiento sistémico. Una parte del problema afecta a ls demás; un sector de una sociedad en problemas afecta a la sociedad en conjunto.Preocuparnos por solucionar los problemas de la sociedad es evitarnos más problemas a todos.

No a la indiferencia

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